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Tips para la vuelta al cole

Buenas tardes,

Últimamente no paro de escuchar eso de «la vuelta al cole» o «qué ganas de que los niños empiecen el cole» o «qué bien viene el colegio para retomar la rutina»,… Yo solamente he ido a la guardería y no entiendo muy bien a lo que se refieren, pero he escuchado a mi mamá decir que ella no piensa así, que ella tiene pocas ganas de que empiece el colegio. Que me va a echar mucho de menos, que vamos a tener que ir a dormir muy pronto y levantarnos también pronto. Ella dice que debe ser de las pocas «raras» que no se alegran de la vuelta al cole.

Y es que la realidad es esa: vamos a pasar de no tener horarios ni obligaciones a tener que retomar una rutina, y eso a veces es un poco difícil. Por eso, hoy os quiero dejar unos consejos para retomar la vuelta al cole de la mejor manera posible (estos consejos me los ha explicado mamá y seguro que nos ayuda a tener una vuelta al cole un poco más fácil):

1.Visitar el colegio días antes: es muy importante que si es la primera vez que vamos a ir al cole, que conozcamos el lugar donde iremos. Así que días antes, los papás pueden llevar a sus hijos a conocer su colegio, el patio e incluso el aula que les toca. Esto es importante porque el primer día será de mucho cambio y si ya hemos ido a conocer el cole, no será tan impactante y ya nos resultará familiar. Y si también tenemos la oportunidad de conocer a la profesora, mejor. Cuantas más cosas podamos adelantar antes del primer día, mucho mejor.

2. Sinceridad: a todos nos gusta que sean sinceros con nosotros. Por lo tanto, los papás deben ser sinceros y explicar lo que los niños encontrarán allí. Por ejemplo, se les puede explicar que habrá una profesora que les enseñará los colores y los números de una manera muy divertida; que habrán otros niños para jugar; que saldrá al patio,… Y lo que no hay que decirles, por ejemplo es «tranquilo, que en un par de horitas ya voy por ti» o «no te preocupes que no irás al comedor (y luego sí que tiene que quedarse».

3.Comprensión: puede ser normal que la primera vez que pisen el colegio lloren, se sientan incómodos, sientan miedo,… es lo más normal del mundo porque existen muchas emociones y todas son igual de válidas, igual que existen muchos niños y todos no son iguales, algunos llorarán y otros no. Lo que los papás deben hacer es ser comprensivo con el niño, es mejor decirles «tranquilo, sé que todo esto es nuevo para ti y puedes sentirte un poco de temor por estos cambios, pero aquí te lo pasarás muy bien y poco a poco entenderás que es un sitio para pasarlo bien, aprender y experimentar como a ti tanto te gusta» que «anda hijo, no llores, mira este niño lo contento que está, va a pensar que eres un llorica y ya no querrá ser tu amigo» porque comentarios de ese tipo les puede causar aún más rechazo y ser un inconveniente. Así que ya sabes, respeta sus emociones y estados de ánimo, apóyalo y dale fuerzas para superar sus posibles miedos.

4. Confianza: mamá siempre dice que los papás son el espejo de sus hijos y su mayor ejemplo. Así que si el niño ve a unos padres tranquilos y contentos el niño será más fácil que comprenda que es un ambiente acogedor que transmite confianza; en cambio, si ve a unos papás tristes, con miedo a que sus hijos no se adapten, etc,.. esta desconfianza se transmitirá al niño y lo podrá pasar aún peor.

5. Hacer en casa actividades similares a las que harán en el colegio: esto puede ayudar a que el niño tenga más autoconfianza en sí mismo, a que sepa que lo puede hacer, porque en casa ya lo ha hecho y como no es algo nuevo, no le dará tanta vergüenza o miedo hacerlo. Será como hacerlo en casa, donde sabe que antes lo ha pasado muy bien y en el colegio podrá ser igual.

6. Una buena despedida: Antes de darle un beso y desaparecer, es importante tomar unos segundos o minutos para hablar y despedirse. Un «bueno cariño, espero que hoy juegues mucho y te lo pases genial, mamá hoy tiene una reunión un poco aburrida pero a la que termine y suene la campana del cole, ahí estaré esperándote, te quiero cariño, muack» será mucho mejor que «hoy no quiero que llores, ¿vale?, hasta después, muack». En el primer ejemplo vemos a una mamá más comprometida que en el segundo ejemplo, el cual ya le está privando al niño de poder sentirse con miedo para defraudar a su madres. Tampoco hay que hacer una despedida demasiado larga, porque el niño puede confundirse. Nos tiene que ver comprometidos y seguros para transmitirles ese mensaje.

7. Padres participativos: Es bueno que durante el curso el niño vea que sus padres colaboran con las tareas o eventos que celebra el colegio. Eso hará ver al niño que el colegio es un espacio abierto, alegre, de confianza, donde todos son bienvenidos y no es un lugar que no valga la pena estar. O en el caso de tareas o deberes, el niño tiene que ver que los padres también se toman en serio esas tareas y se involucran. Esto ayudará a que el niño se de cuenta de que su trabajo en el colegio es importante y vale la pena. Un ejemplo de esto será cuando en otoño pidan que traigan cosas relacionadas con esa estación, un día padres e hijos irán a la montaña a buscar hojas, piñas, ramas secas,… eso le encantará al niño además que comprenderá que sus papás también colaboran con el colegio y eso hará que ellos sean más participativos. Porque no olvidemos que la enseñanza no es función exclusiva del colegio, en casa y en familia es donde más se aprende. Si vemos a unos papás despreocupados, ¿cómo podemos exigir que nuestro hijo sea responsable y le guste el colegio?

8.Comunicación: También dará mucha confianza al niño hablar con él después del colegio, por ejemplo, durante la comida o la cena, todos comiendo en familia reunidos en la mesa. Un «cariño, ¿hoy que habéis hecho en clase?» o «¿habéis trabajado los colores? ¿cuál ha sido tu favorito, el verde? A mí me encanta ese color, como por ejemplo las manzanas verdes». Hablar es muy bueno, además de comunicarse y expresarse, el niño podrá sentirse orgulloso de haber aprendido algo nuevo y de ver cómo puede hablar y entenderse con su mamá sobre lo que ha aprendido y jugar con el entorno para aplicar lo aprendido.

9.Paciencia: mil dosis de paciencia en los primeros días de cambio. No será fácil ni para ti ni para tus hijos, así que paciencia y comprensión infinita.

10. Explicarles la importancia de ir al colegio: Los niños deben entender que el colegio es un sitio para aprender, para desarrollar sus habilidades, para ser mejores personas, para ser más inteligentes,… y no para que piensen que solo sirve para que los papás podamos ir a trabajar. Deben entender que es un sitio donde aprenderán y jugarán, lo pasarán bien mientras hacen cosas nuevas y muy importantes para ellos. Por ejemplo: «en el colegio te enseñarán los números y me podrás ayudar a decir los precios cuando vayamos a comprar».

 

Y ya para acabar, y como consejo extra de mi mamá, recordar hacer una foto del primer día de clase para luego compararla con la del último día o alguna con alguna pizarra o que sea original, igual que estos dos ejemplos que ves a continuación:

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Os deseamos una ¡¡Feliz vuelta al cole!!

Un saludo,

Lucas.

Paciencia mamá*

Paciencia mamá.

Este texto va para ti, mamá, que siempre vas corriendo a todas partes y con mil cosas en la cabeza, preocupada y angustiada, sin disfrutar de la vida, sin saborearla.

Paciencia mamá, la necesitarás cuando la gente se meta en nuestras vidas y te quieran volver loca. No les hagas caso, haz oídos sordos y sigue tu instinto porque lo harás muy bien. No dejes que te saquen de tus casillas, simplemente asiente pero haz lo que veas que es mejor para los dos.

Paciencia mamá, cuando lloro no es por gusto, es porque me pasa algo. Igual tú piensas que aunque haya comido y dormido ya tengo que estar bien, pero quizás me faltan mimos o necesito estar contigo. Deja lo que estés haciendo, nada es más importante que estar juntos. Los platos puedes fregarlos más tardes y el polvo se puede quitar después. Pero yo no seré niño para siempre, creceré y el tiempo hará que mi infancia se esfume. Así que disfrútala al máximo, mamá.

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Paciencia mamá, no quieras alterar mis ritmos y me hagas mayor antes de tiempo. No quieras que deje el pañal cuando no estoy preparado o quieras que ande cuando tú quieras. Ten paciencia y no te agobies, todo llega. Yo no conozco a nadie de veinte años que no haya aprendido a andar ni que lleve pañal. Paciencia, respétame y acompáñame en este camino lleno de retos y aprendizajes.

Paciencia mamá, sé que a final del día estamos todos un poco cansados y a veces, yo estoy irritable y no siempre obedezco lo que me dices. Si me dices que me ponga el pijama a veces me lo tomo a mal o cuando dices de sentarnos a comer yo quiero seguir jugando. No me grites, escúchame y lleguemos a una solución en la que no tengamos que alterarnos ni perder la paciencia. 

Paciencia mamá, para todo. Verás que serás más feliz si te lo tomas todo de otra manera, sin prisas y sin reloj. Sustituye un soplido o un grito por un beso o por un abrazo. Los dos seremos más felices, la prisa se esfumará y podremos disfrutar del momento. Cuando me digas que recoja, no esperes que lo haga corriendo como tú esperas, ¿me ayudas y cantamos juntos una canción que acabará con un abrazo fuerte? O cuando vayamos al colegio y yo vaya detrás de ti porque tengo un ritmo más lento ¿por qué no me das la mano y jugamos al juego de «qué podemos encontrar en un supermercado/en una granja/….? Verás que me animo y lo pasaremos mucho mejor que si vamos o hacemos las cosas de morros y enfadados. Recuerda que el tiempo vuela, que pasa muy rápido y que cuando te des cuenta, ya no seré el niño que era. Así que estemos siempre felices, démonos muchos besos (¡¡que son gratis!!) y los abrazos que nunca falten, por favor.

Paciencia mamá, ¿sabes lo que ayuda mucho? Salir de la rutina, hacer cosas diferentes y nuevas. ¿Por qué en vez de salir al parque como cada tarde, nos vamos a dar un paseo por la playa? ¿Por qué en vez de quedarnos en casa, salimos a merendar a la cafetería que han abierto nueva? Podemos hacer muchas cosas juntos que son muy divertidas, recuerda que lo que tienes por hacer no es tan importante como estar conmigo. Ya cocinaremos luego, ya pondremos la lavadora mañana, pero ahora, disfruta de mí porque te quiero, mamá.

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*mamá se puede sustituir por papá, por abuelo, por abuela, por tía, por marido, por esposa, por alguien a la que quieras. Ten paciencia, empatía y ama con todo tu corazón.

Lucas.